Rodrigo de Portillo: Carta desde Mazalquivir en marzo de 1564 de un pagador y tenedor recién llegado. JUEGO DEL LEGAJO 486 (Simancas, Estado)-02
Autor del Documento: Equipo CEDCS
Descripción / Resumen:
El cerco de Orán por Hasán Bajá, el hijo de Barbarroja, nuevo rey de Argel por tercera y última vez, el año anterior, debió hacer que en la corte española se quisiera reforzar con prisas aquellas dos plazas de Orán y Mazalquivir que tanto habían sufrido durante el cerco; el 14 de febrero de 1564 llegaba a Mazalquivir un nuevo pagador y tenedor de bastimentos, Diego Portillo, y el 7 de marzo un nuevo hombre para acelerar las obras de la fortaleza de Mazalquivir, reforzando al ingeniero Juan Bautista Antonelli, Francisco de Valencia. La llegada de Francisco de Valencia fue accidentada, pues hasta el 19 de marzo no consiguió desembarcar a causa del mal tiempo, y ya que su nave era demasiado grande para entrar en el puerto de la ciudad. El 23 del mismo mes de marzo llegó también un nuevo contador, Cristóbal Vázquez de Ávila, en una nave genovesa cargada de bastimentos para la plaza procedente de Cartagena. En esos tres envíos de los lugares habituales de provisión para las plazas de aquella frontera, Málaga y Cartagena, llegaron refuerzos de todo tipo, hombres, madera, vituallas y bastimentos, con lo que parece que de momento se remedió la situación penosa de aquella gente, que había causado muchas enfermedades entre ellos, al decir de Portillo.
Ese es el marco en el que se inserta esta interesante carta de Portillo comentando la difícil situación de aquella plaza a su llegada, en plenas obras de construcción del fuerte sobre el mar, muy resentidas por la falta de dinero y materiales, y con la gente muy desmotivada y muchos enfermos a causa de aquellas necesidades. Aunque la llegada de Portillo con dinero y nuevos recursos palió un poco la situación, hubieron de emplear nuevos incentivos, como la forma de pago a la gente que trabajaba en las obras: les dieron un real cada día para que pudieran pagar su comida diaria, y con el pago mensual del resto de su sueldo pudieran hacer frente a sus otras necesidades, sobre todo de ropa. Esa fórmula evitaba que se gastaran el sueldo mensual en el juego, por ejemplo, si se lo daban de una vez, cosa al parecer frecuente, al decir de Portillo.
Del dinero concedido a Portillo para aquella plaza, que eran 20.000 ducados, seis mil los había gastado ya en Málaga para los bastimentos traídos, a través del pagador Lope Giner; una vez en Mazalquivir, y al llegar a aquella plaza recibió los batimentos que allí tenía Alonso Pizarro, como nuevo tenedor de ellos y al que debían dirigir los nuevos envíos desde Málaga y Cartagena, según supo allí que habían ordenado desde la corte de Madrid por cédula real; con todo ello, Portillo se convertía en un hombre clave para la administración de la plaza, y con línea directa con la corte, como se ve por sus cartas de este tiempo.
El cerco de Orán por los turcos del año anterior había destruido los molinos que había en Orán, con lo que faltaban las moliendas y por lo tante la harina, y el tenedor Portillo pedía que con el trigo que se enviara a Mazalquivir viniera también harina, pues sabía que también en Orán sufrían de esta carencia. Lo mismo pasaba con las barcas enviadas de Málaga, que no bastaban para el transporte de materiales de construcción, como cal y arena, o para la descarga de navíos, con lo que pedía que se enviaran más barcas, así como palamentos y personas que las gobiernen, que tampoco bastaban las que allí había.
Un capítulo especial era el del hospital que, a causa de los muchos enfermos y bajas, para el que necesitaban material, como ropa de cama. Y luego estaba el asunto de la financiación; la financiación actual es que la gente que allí vive dan tres reales al año, y el pan y las medicinas las pagan los enfermos del hospital; la nueva fórmula que quieren instaurar es que cada hombre a sueldo de la plaza pague un real al mes – un aumento apreciable, de tres a doce reales al año – como es usual en otros hospitales, y eso no está mal visto por la gente que allí vive, pues casi todos tienen que utilizar los servicios del hospital a lo largo del año.
Y, finalmente, una interesante apreciación sobre los pagos de los gastos necesarios en las plazas; mucha gente particular de Orán tiene dinero y capacidad económica de hasta tres y cuatro mil ducados, y estarían interesados en participar en la financiación de las plazas siempre que se les devolviera el dinero en Cartagena, pues es dinero que quieren enviar a España. Si el rey lo aprobase, ayudaría a la financiación, siempre compleja, de aquellas plazas.
Estas cartas, pues, son de gran interés para imaginar la vida cotidiana en aquella frontera, sobre todo las de estos oficiales en estrecho contacto tanto con los soldados y la gente de a pie como con los gobernadores y oficiales de aquellas fronteras.
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02-1564-Rodrigo de Portillo desde Mazalquivir
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Archivos Adjuntos
Ficha Técnica y Cronológica
- Personajes: Rodrigo del Portillo, Felipe II, Francisco de Valencia, Juan Bautista Antonelli, Cristóbal Vázquez de Ávila, Alonso Pizarro, Lope Giner, conde de Alcaudete,
- Palabras clave: abastecimientos, antropología, bastimentos, frontera, gobernanza, pagador, pagas, provisiones, sueldo
- Autor de la fuente: Rodrigo Portillo
- Título de la fuente:
- Impresor:
- Ediciones / Ediciones Críticas:
- Archivo de procedencia: Archivo General de Simancas / Volumen: - Sección: Estado - Legajo: 486 - Documentos: s.f., (doc. 18 de microfilm CEDCS)
- Tipo de documento: Carta / Estado: Transcripción, Actualización, Completo
- Época: Moderna / Siglo: XVI DC / Año: 1564
- Zona geográfica: África, Mediterráneo, Eurasia / Localización: Mazalquivir, 27 de marzo de 1564