Mapeando a Hayreddin: una representación cartográfica de la campaña otomana a Apulia y Corfú en 1537

Esta presentación cartográfica ha sido entendida, desde su creación, como una fórmula narrativa distinta a la del texto de investigación para el que fue creada. Si aquella utilizara de forma predominante, mas no exclusiva, formas textuales de exégesis documental, esta otra fórmula de visualización de la información ha sido el resultado de representar sobre una forma gráfica digital basada en los portulanos de la época, no sólo los datos extraídos de la documentación, sino una narrativa que pudiera sostenerse con propiedad en sí misma, es decir, que contara aquella historia, o partes de ella, conformando un todo explicativo diferente del textual.

Ha seguido, pues, la elaboración de esta carta, un esquema organizativo distinto al de aquel empleado para la interpretación textual. Se ha optado por una narración lineal, que comenzara por dar una visión general del Mediterráneo, mostrando en sus aguas las acciones de combate y los movimientos de las fuerzas navales y terrestres turco-berberiscas, y de la escuadra francesa, entre los veranos de 1536 y de 1537. Seguidamente, se añadieron tres representaciones del canal de Otranto y del Mar Jónico, el área marítima en que las acciones se concentraron finalmente en el tiempo, para exponer los ataques realizados contra Corfú y Apulia en diferentes momentos de aquel último verano.

Por otra parte, la información de la que el autor de dicha tesis partiera en un principio para realizarla tuvo que ser reestructurada con objeto de servir de guión a la elaboración de la carta. Si bien la forma XML-TEI que se diera a las transcripciones de la documentación de archivo resultaba útil, no servía a los propósitos de mostrar la información gráficamente. Fue necesario seleccionar la información, detectar las entidades de acción –flotas, escuadras, ejércitos…–, categorizarla por dichas entidades, referenciándola de nuevo y ordenándola cronológicamente, elaborando a la par dos listados, uno de acciones y otro de espacios nombrados en los textos, a los que habría que añadir los espacios que, no enunciados, era necesario señalar, y las acciones que, aun no siendo indicadas expresamente, seguían el hilo de los sucesos. Esta reordenación de la información sirvió, inicialmente, para los fines de su expresión textual, permitiendo descubrir lugares de difícil detección a partir de la documentación, o revelando rumores en aseveraciones que se creían firmes y verídicas. Se recompusieron, pues, ambas narrativas.

Una mayor complejidad técnica implicó la concreción de las propias representaciones cartográficas. Aunque en un principio se barajó la opción de utilizar un plano del Mediterráneo realizado en la actualidad, de los que se puede encontrar en espacios de almacenamiento de imágenes vectoriales de acceso y uso libre, como Wikimedia Commons, pronto se alumbró la idea de utilizar al efecto un portulano del siglo XVI. Se consideró que con el cambio no se perdería precisión geográfica, puesto que un mapa actual no se corresponde, ni mucho menos, con la línea de costa a la fecha de elaboración del mapa con aquella que existía en el siglo XVI, y no era objeto de esta presente investigación localizar aquella para todo el ámbito mediterráneo, mucho menos representarla en un mapa. Se privilegiaba, por el contrario, el acercamiento a un espacio histórico que, con mayor o menor acierto, no sólo se habría definido con las palabras de los espías, sino que también se habría imaginado cartográficamente.

De este modo, y tras un amplio proceso de búsqueda, para la visualización general del *Mare Nostrum* se optó por recurrir al Atlas creado en 1544 por Battista Agnese, cartógrafo genovés al servicio de la república de Venecia. De entre las diversas representaciones digitales de su obra que se encuentran disponibles en línea, se eligió la versión ofrecida a través de la Biblioteca Digital Hispánica por la Biblioteca Nacional de España, que preserva dos ejemplares en la sala Goya de su sede en Recoletos, en Madrid, bajo las signaturas GMM/2141 y GMM/2142. El cartógrafo desplegó en diecisiete láminas el conocimiento que de las costas del mundo tenía al momento, de las cuales de la ocho a la trece corresponden al ámbito mediterráneo, mismas que hubieran de ser escaladas y superpuestos sus límites, haciéndolas coincidir loxodrómicamente, para conformar un diseño cartográfico viable en cuanto a la escala de detalle para el mapa general propuesto.

Por otra parte, para la representación del mar Jónico y del canal de Otranto se eligió el Kitab-i Bahriye de Piri Reis, elaborado en 1525, escogiéndose la versión digital ofrecida por la David Rumsey Map Collection de la Stanford University, realizada a partir de una copia de dicha obra realizada a finales del siglo XVIII o principios del XIX, que se conserva actualmente en el Walters Art Museum de Baltimore, bajo la signatura W.658. De las láminas que componen dicha obra, se seleccionaron cinco para que, del mismo modo escaladas y unidas por solapamiento, se comprehendiera el ámbito geográfico de los mapas propuestos.

En ambos casos se reorientaron las representaciones cartográficas originales con el objetivo de facilitar la exposición de los movimientos y acciones que se deseaba representar. A la vista de las expresiones estilísticas de ambos mapas, se decidió completar la presentación con un conjunto de seis rosas de los vientos extraídas de la obra de Piri Reis, y realizar una corta investigación para mostrar, mediante diversas banderas, la localización general de los poderes ubicados en la costa del Mediterráneo. De nuevo, se presentó una posible complicación, la de la percepción de los colores, seleccionando un conjunto –Solarized Dark, de Ethan Schoonover– que permitiera una expresión muy aproximada al uso de tinturas en la cartografía de la época, además de preservar un contraste que permitiera la lectura e identificación a simple vista en una relación que nunca fue menor de Cr 4.5:1, con lo que se cumplía con un nivel AA del lineamiento WCAG del W3C.

Además, se hubo de realizar un complejo y laborioso proceso de vectorización manual por computadora sobre ambos ensamblajes cartográficos, no vectorizando las imágenes mediante algoritmos de automatización de dichos procesos –mismos que podían forzar errores o diferencias sustanciales en la presentación–, sino siguiendo los trazos de sus dibujantes originales, trasladando de este modo los mapas diseñados por Agnese y Piri Reis en papel a un medio digital. El programa empleado para ello fue Inkscape, un editor de gráficos vectoriales libre, gratuito y de código abierto. La formación de la visualización hizo necesaria la conjunción de los cuatro mapas en una sola lámina desplegable pues, habiendo considerado la opción de mostrar aquellos de aproximación al canal de Otranto por separado, ocupando cada uno de ellos una página completa, se comprobó que, de esa manera se dificultaba la comprensión general de la información expresada, eliminando la ventaja pretendida de permitir al lector la inferencia de conclusiones por cuenta propia y sin necesidad de acceder al texto.

Para concluir con el diseño, a partir de un esquema lineal de diseño, dado que eran líneas de costa y líneas de acción las que serían más relevantes para expresar la narración, se diseñó un conjunto de símbolos cartográficos sencillos, con escasas alteraciones a los comúnmente utilizados en la cartografía naval de mediados del siglo XX. Por último, se eligieron dos tipografías, ambas libres, abiertas y gratuitas, dado que se habrían de producir dos cartas: una formada dentro de la tesis, y la otra –esta que aquí se ofrece– a compartir desde la web Archivo de la Frontera. Para el primer caso se optó por Iosevka, de Renzhi Li, puesto que permitía la correcta presentación de cualquier carácter tipográfico manuscrito que pudiera aparecer, ya en la documentación textual, ya en la cartografía portulana de la época; para el mapa aquí presentado, se empleó Grenze Gotisch, de la autoría de Renata Polastri, para Omnibus Type, que permitía preservar en buena medida la forma caligráfica de la expresión textual de los portulanos de mediados del siglo XVI, sin obstruir en exceso la lectura de la carta al presentar una buena relación de aspecto, y con una selección de glifos suficiente por lo abundante.

En ambos casos se descubrió un área en desuso, producida por la doblez del papel, tras haber reducido la cantidad de símbolos para la información a expresar. Sin que fuera el horror vacui el efecto que se pretendiera eliminar, se añadieron unas estrofas de la comedia El trato de Argel, de Miguel de Cervantes Saavedra, que, aunque de realización posterior a los hechos descritos en el mapa, realzaba por su expresión el sentido de los movimientos navales mostrados en la carta.

Para acceder a la representación cartográfica, haga click en:

Mapa de la campaña otomana a Apulia y Corfú de 1537 en .pdf

Mapa de la campaña otomana a Apulia y Corfú de 1537 en .png

 

Una buena selección de avisos de levante llegados a Nápoles referentes a las acciones turcas del verano de 1537 pueden verse en este contenido del Archivo de la frontera:

http://www.archivodelafrontera.com/archivos/avisos-de-corfu-durante-el-asedio-turco-de-1537-y-el-viaje-de-socorro-de-pedro-de-zamora/

 

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